Más de 83 años de tradición
Hasta finales del siglo XIX La Oblea era un producto complementario del turrón y de dulces típicos, centrando su producción en los meses de junio a diciembre principalmente. El proceso de creación era de carácter familiar y realizado en las propias viviendas. Una vez elaborado el producto se procedía a su comercialización por las grandes ciudades en los días previos a la Navidad.
A finales del mismo siglo se produce un cambio significativo en la producción de la oblea, ya que la fuente de energía utilizada pasa a ser el vapor, con lo que se hace necesario la construcción de las primeras fábricas en el extrarradio de la ciudades. También se amplían las redes de comercialización. Hasta estos momentos el principal lugar de destino de la oblea era Jijona por su tradición turronera; así que a partir de ese momento se expande a Madrid, y a las importantes ciudades de Barcelona, Valencia, Murcia y Andalucía; donde empieza también a fabricarse Turrón de forma industrial.